Es hora

Quién eres? La Muerte.
A qué Vienes? A llevarte.
Por qué?
Porque has vivido bastante.


Pero aún no he hecho todo,
quizás ni la tercera parte.
Aún le debo a la vida,
lo que gentilmente quiso prestarme.


No importa, ya es tarde;
debiste aprovechar mejor
todo el tiempo y las oportunidades;
que una a una desaprovechaste.


Vamos, se hace tarde.
Permíteme un instante más...
no me lleves aún,
después... después, llevaré tu estandarte.

Lo lamento, es hora,
mi orden es clara,
no puedo fallar, nunca he fallado;
debes morir esta tarde.


Tu hora se ha cumplido,
no debes arrodillarte.
Te lo suplico, permíteme acariciar
una vez más el sol, el agua y el aire.

Esta bien, solo un momento,
te daré unos minutos
sólo unos minutos, después...
después debes resignarte.

Estás listo?
Vamos, no puedo aguardar más,
el camino es largo,
el fuego... el fuego ya arde.

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