No Sufras Patria Mia
No llores Patria mía; sabremos salir adelante. Entiendo tu dolor y comprendo tu pregunta constante: ¿Por qué sufren mis hijos? ¿Por qué esta pena tan grande? No... No... No te aflijas, trataré de contestarte. Hemos perdido el rumbo; ya no luchamos como antes. En el pesado andamiaje del tiempo parecen haber quedado olvidados, el valor, el esfuerzo y la tenacidad de nuestros padres. Aquellos, los que fundaron una Nación próspera, hidalga y pujante. Los mismos que con lanzas, boleadoras, en mulas y en pelotas cruzaron el macizo de los Andes, y dieron libertad a otros pueblos; y se enorgullecieron de ver tu insignia erguida y flamante. ... Y así proclamaste la libertad, la igualdad y el progreso para todos tus habitantes. ... Porque hemos tirado tanta gloria a la basura; que nos llevó tantas veces a defraudarte. ... Culpamos a los políticos, los economistas, los de afuera, los de adentro, los corruptos, los de aquí, los de allá; los de cualquier parte. ... Y si